El Endeavour tiene problemas

El transbordador Endeavour entró ayer en la órbita terrestre, pero luego del lanzamiento -el miércoles, en una misión de 16 días a la Estación Espacial Internacional, ubicada a 342 kilómetros de la tierra-, la NASA detectó que se desprendieron entre ocho y nueve trozos del tanque externo, y al menos uno golpeó su estructura. La falla fue detectada por las cámaras externas de la nave que transmitieron la caída de varios trozos.

Para constatar los daños, los astronautas realizaron ayer una meticulosa inspección de la cubierta térmica del transbordador, mientras que ingenieros en la Tierra revisaban las fotografías que mostraban fragmentos desprendiéndose del tanque de combustible y golpeando la nave. El comandante Mark Polansky y los otros seis astronautas usaron ayer un brazo robótico y cámaras para estudiar los paneles térmicos que cubren los bordes de las alas y la nariz de la nave.

En principio, el Control de Misión informó a los astronautas que el daño parecía menor a primera vista, aunque tomará varios días para analizar los datos disponibles y llegar a una conclusión.